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Los Tigres de la UANL jugaron 81 minutos con desventaja numérica, por lo que terminaron por perder 1-0 ante los Rojinegros del Atlas en una mala noche en el Estadio Universitario.
José Antonio Castro recibió tarjeta roja directa a los 12 minutos, en una jugada en la que llega tarde, y en un momento donde el equipo que dirige Daniel Guzmán dominaba el partido.
El arranque del encuentro fue explosivo para los felinos, creando opciones y dando sensación de peligro sobre el arco atlista, donde Itamar Batista y Francisco Acuña fueron piezas importantes en ese momento.
Incluso, Acuña se internó a los ocho minutos en el área por la derecha, pero su disparo cruzado salió pegado al poste izquierdo, por fuera de la línea de meta.
Luego vino la expulsión sobre el “Gringo” Castro, teniendo que ajustar el técnico Guzmán sacando a Acuña, para meter, a los 25 minutos, a Israel Jiménez.
El árbitro Paul delgadillo tuvo una actuación que dejó mucho que desear, incluso, cuando ya había expulsado a Castro, le mostró tarjeta amarilla supuestamente por reclamar la roja. Después no marcó una mano de Mario Méndez en el área, en lo que era un penal clarisimo para Tigres.
La desventaja numérica le dio al visitante la posesión de balón, pero sin tener penetración al área de Cirilo Saucedo, que aguantó bien todos los embates de los Rojinegros.
Sin embargo Daniel Osorno y Darío Botinelli comenzaron a inquietar el arco felino, y a los 34 minutos, en un balón que salió por el lado derecho, Gonzalo Vargas lo tomó a contrapie y sacó un disparo que dejó sin oportunidad a Cirilo para hacer el 1-0.
Para la parte complementaria Tigres tuvo un momento de coraje y comenzó a inquietar el arco de Mariano Barbosa, pero sin lograr acercarse si quiera a una opción clara de gol.
Aún así el segundo tiempo Tigres tuvo la posesión, pero sin mucho “punch” para encontrar el empate.
Sin embargo Itamar estuvo cerca cuando Lobos, por la izquierda, mandó un centro que se paseó por el área de Barbosa, sin que el brasileño llegara a cerrar, cortando la zaga a tiro de esquina.
Después el propio Itamar alargó un balón que buscaba a Cardoso, quien entra al área y choca con el arquero Barbosa, en aparente penal, pero el árbitro dejó seguir, pese a que el brasileño salió lesionado del hombro izquierdo y la pierna derecha. Ya no pudo seguir, entrando Emmanuel Cerda.
Tigres intentó, buscó, pero perdió también a Lucas Lobos por lesión en la rodilla derecha, entrando por él Amaury Ponce, pero sin gravitar mucho en el ataque de Tigres.
Al final se decretó el final, a los 93 minutos y 20 segundos, pese a que el alargue era de cuatro minutos más. Ahora Tigres tendrá que buscar el sábado rescatar tres puntos vitales, cuando visite al Cruz Azul.
El arranque del encuentro fue explosivo para los felinos, creando opciones y dando sensación de peligro sobre el arco atlista, donde Itamar Batista y Francisco Acuña fueron piezas importantes en ese momento.
Incluso, Acuña se internó a los ocho minutos en el área por la derecha, pero su disparo cruzado salió pegado al poste izquierdo, por fuera de la línea de meta.
Luego vino la expulsión sobre el “Gringo” Castro, teniendo que ajustar el técnico Guzmán sacando a Acuña, para meter, a los 25 minutos, a Israel Jiménez.
El árbitro Paul delgadillo tuvo una actuación que dejó mucho que desear, incluso, cuando ya había expulsado a Castro, le mostró tarjeta amarilla supuestamente por reclamar la roja. Después no marcó una mano de Mario Méndez en el área, en lo que era un penal clarisimo para Tigres.
La desventaja numérica le dio al visitante la posesión de balón, pero sin tener penetración al área de Cirilo Saucedo, que aguantó bien todos los embates de los Rojinegros.
Sin embargo Daniel Osorno y Darío Botinelli comenzaron a inquietar el arco felino, y a los 34 minutos, en un balón que salió por el lado derecho, Gonzalo Vargas lo tomó a contrapie y sacó un disparo que dejó sin oportunidad a Cirilo para hacer el 1-0.
Para la parte complementaria Tigres tuvo un momento de coraje y comenzó a inquietar el arco de Mariano Barbosa, pero sin lograr acercarse si quiera a una opción clara de gol.
Aún así el segundo tiempo Tigres tuvo la posesión, pero sin mucho “punch” para encontrar el empate.
Sin embargo Itamar estuvo cerca cuando Lobos, por la izquierda, mandó un centro que se paseó por el área de Barbosa, sin que el brasileño llegara a cerrar, cortando la zaga a tiro de esquina.
Después el propio Itamar alargó un balón que buscaba a Cardoso, quien entra al área y choca con el arquero Barbosa, en aparente penal, pero el árbitro dejó seguir, pese a que el brasileño salió lesionado del hombro izquierdo y la pierna derecha. Ya no pudo seguir, entrando Emmanuel Cerda.
Tigres intentó, buscó, pero perdió también a Lucas Lobos por lesión en la rodilla derecha, entrando por él Amaury Ponce, pero sin gravitar mucho en el ataque de Tigres.
Al final se decretó el final, a los 93 minutos y 20 segundos, pese a que el alargue era de cuatro minutos más. Ahora Tigres tendrá que buscar el sábado rescatar tres puntos vitales, cuando visite al Cruz Azul.